miércoles, 3 de junio de 2015

Mi voto por Cuernavaca Sustentable

La elecciones del 2015 en todo México están a la vuelta del fin de semana. Hace ocho días comenté sobre mi decisión de votar por una Cuernavaca Sustentable. Recibí varios comentarios, algunos fueron publicados en mi bitácora (blog), donde me pedían que pusiera nombres o definiera con mayor precisión, solicitaban que dijera más e hiciera un análisis de las propuestas. Les comento que en estas líneas es complicado hacer análisis y argumentar con detalle, sin embargo traté de hacerlo en aquella ocasión. Otros, me invitaban a no votar. Respecto a este punto, les tengo que comentar que en días pasados tuve que renovar mi pasaporte y en la interminable cola para recogerlo entablé una amena plática con una mujer que impulsaba la propuesta de no votar. Coincidimos en que ambos lamentamos el no poder escuchar a Carmen Aristegui en las mañanas, que disfrutamos de ver “Primer Plano” los lunes por Canal Once, que leemos los periódicos locales; pero claramente diferimos en la propuesta de votar o no votar. Le comentaba que yo no renunciaría a poder decidir, que no todos los políticos o los partidos políticos eran iguales, que la forma de protestar era escribir, manifestarnos y proponer alternativas de solución. Ella me argumentaba que el votar era validar el gobierno, que todos los candidatos son iguales y no nos representan. Para hacer breve el relato, finalmente ambos recogimos nuestro pasaporte y nos despedimos con buenos deseos, sabiendo que compartíamos ideas y preocupaciones; pero sin habernos convencido el uno al otro. Este sábado nuevamente tuve una plática con entrañables amigos, una colega de mi esposa y su hijo, antiguo discípulo en el ámbito de la física, con ellos también llegamos al punto de discutir sobre las elecciones. Nuevamente salió el tema del no ir a votar y en esta ocasión coincidimos en el punto de vista: Tenemos que ir a votar y seleccionar dentro de las opciones disponibles y que con nuestro actuar o no actuar hemos construido.
El domingo leí una ilustrativa entrevista a José Woldenberg por parte de Miguel de la Vega en el Reforma, donde el Dr. Woldenberg comenta sus razones para ir a votar. Coincido plenamente con sus planteamientos y considero que los votos son para elegir, escoger a nuestros gobernantes y que si no tenemos un mejor gobierno es porque nosotros mismos no lo construimos. Parte de estos argumentos, que algunos consideran palabrerías, los manifesté la semana pasada y fueron compartidos por otros lectores. Reitero, debemos participar con los políticos y construir nuestra sociedad, la sociedad que queremos.
En estas breves líneas tengo que comentar, que mi escrito de la semana pasada, desde mi perspectiva, apuntaba a diversas ideas que pueden ser promovidas en Cuernavaca, y por lo tanto en otras ciudades. Claramente, estas propuestas son promesas y, por supuesto, promesas de campaña de algunos candidatos. De nosotros depende construir los mecanismos para asegurar que se cumplan.
La elección de los diputados o de los presidentes municipales no es una cuestión de representación, sino una toma de decisión para elegir entre las opciones que tenemos.
Desde mi perspectiva el que cada vez más ciudadanos manifestemos nuestras ideas, intercambiemos opiniones, propongamos alternativas de solución a los problemas, participemos en la vigilancia del ejercicio de la autoridad, nos informemos e informemos, generemos conocimiento de nuestro entorno para poder decidir con todo esto; nos dará la fortaleza como sociedad.
Lo anterior puede parecer palabrerías y dichos que todos sabemos, pero mientras no logremos que una buena parte de la sociedad (cuernavasense, morelense, mexicana o del mundo) actuemos, tendremos los gobiernos que elijamos o dejemos que otros lo hagan.
Es más un punto muy importante que debo mencionar es que para elegir a un diputado, presidente municipal, gobernador, senador, o presidente no es necesario estar totalmente de acuerdo con ellos o coincidir en todos los aspectos o sus propuestas. La elección debe basarse en el hecho que somos diversos, pensamos diferente y, aunque somos individuos, construimos un ente social que puede conseguir el bienestar social solo mediante la toma de decisiones democráticas informadas.
Desde mi punto de vista, solamente existe una plataforma política construida con miras a construir una Cuernavaca Sustentable que primero involucra a muy diversos actores que mostraban seriedad y compromiso en diferentes partidos, donde luchaban por impulsar ideas ciudadanas. Segundo contempla acciones que promueva el respeto a la sociedad de derechos, que mejore los servicios que ofrece, que se ocupe de la seguridad, que tenga una vocación de servicio y que genere oportunidades. Tercero que tenga claro los límites y ámbito de competencia del gobierno de una ciudad. Por estas razones, aunque puedo diferir en algunas acciones, mi voto convencido e informado es para recuperar Cuernavaca.

Este artículo fue publicado el día 3 de Junio en el periódico La Unión

3 comentarios:

  1. Impresionante… Desde luego, has aprendido algo de los políticos. Volviste a no decir nada, pero con diferentes palabras. Es increíble que te hayas tomado el tiempo de escribir algo para supuestamente responder a los que contestamos a tu anterior publicación y de nuevo no digas nada substancial. Así mismo son los políticos que no nos representan. Ellos dirían: "les comento que en estas líneas es complicado hacer análisis y argumentar con detalle (sic)" pero... "daremos agua a Cuernavaca, acabaremos con la inseguridad, generaremos nuevos empleos, desendeudaremos al cabildo, acabaremos con la corrupción, daremos computadoras a todas las escuelas, becas para no dejar los estudios, becas de primer empleo, iluminaremos la ciudad, pondremos un morebús, ampliaremos el libramiento (y no mencionaremos que será masacrando todos los árboles), acondicionaremos nuevos espacios públicos, etc, etc, etc. No les diremos cómo, pero se lo prometemos, confía en nosotros, tú nos conoces, tu voz es nuestra voz, claro que sí podemos, hemos estado trabajando para ti, somos tu voz, somos el verdadero cambio". ¿Ves Antonio? Todas esas son palabras muy correctas, que puestas juntas se convierten en palabrería y buenas intenciones. Como tus dos últimos escritos. Aunque te duela. Cuando un académico como tú es respetado por la comunidad debería adoptar una posición más honesta y (aunque se queme con los políticos) transmitir a los demás una postura seria, directa. ¿Cuál es tu plataforma "sustentable" (para empezar, ninguna plataforma lleva esa palabra en su nombre)? ¿No puedes asumir el riesgo político que ello implica y directamente decir su nombre? ¿Por qué crees que es "sustentable"? ¿Puedes decirnos por qué debemos creer lo que prometen? Si puedes hacerlo, te lo vamos a agradecer. Si no puedes, pues encaja las críticas con dignidad y no escribas secuelas que lo único que demuestran es que te molestaron y no las reconoces como legítimas. El voto es libre y secreto, si no quieres decir directamente por quién votarás y explicar claramente por qué, pues nada, estás en tu cómodo derecho.

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  2. Hablar a nombre de los políticos es arriesgado. Mejor compártanos detalles de su propia labor. ¿Que hay de sustentable en el instituto que usted dirige? ¿Allí hay elecciones democráticas y la gente puede expresarse sin temor a represalias? ¿Todas las cuentas son claras y transparentes? ¿Las empresas propiedad de algunos de los académicos se ven beneficiadas con contratos del instituto? ¿Existe un plan concreto o siquiera una visión para el desarrollo de las renovables en el país que no obedezca a intereses políticos? ¿Hay pluralidad, consensos e intercambio de ideas, o se privilegian las opiniones del cuerpo académico en el poder por sobre las de los grupos rivales? ¿Hay un beneficio económico por llamar a votar indirectamente por el candidato que está vinculado política y emocionalmente con gente que labora o laboró en su instituto?

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  3. La eleccion ya paso y nos coloco en el peor de los escenarios, con un futuro presidente municipal completamente ignorante y nula capacidad. Como se ve, el pueblo se equivoca, pero necesitamos respetar ese mandato. Por otro lado, ningun partido ni candidato menciono ningun proyecto de gobierno sustentable. Creo que esa deberia ser la tarea para el 2018. Saludos!

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