miércoles, 26 de abril de 2023

Cambio cultural para el bienestar social

Estamos enfrentando una muy compleja situación. Muchos aspectos de nuestra vida cotidiana pueden verse afectados en las próximas décadas. Desde las dificultades económicas, la crisis del agua, el cambio climático, la marginación de diferentes sectores de la población y la polarización social son muestras de las muchas facetas de esta compleja situación que necesitamos resolver para transitar hacia el bienestar social.

Con vías a contribuir a solucionar esta situación se ha propuesto implantar modelos de ciudad de 15 minutos. Esta idea consiste en diseñar o adaptar entornos habitacionales donde la población puede satisfacer sus necesidades de trabajo, educación, adquisición de alimentos y enseres, esparcimiento, acceso a la salud, en fin la mayoría de ellas dentro de un tiempo de desplazamiento de entre 15 y 30 minutos. Es decir, se requeriría cambiar las actuales configuraciones de colonias o suburbios dormitorio por entornos donde existan infraestructuras y en una misma superficie se puedan satisfacer varias necesidades.

Este tipo de conceptos son más complicados en ciudades construidas entre barrancas. Por ejemplo, Cuernavaca o Taxco pueden presentar desventajas significativas. Algunas de ellas son: Su topografía que implica que hay terrenos con pendientes y desniveles significativos, lo que puede dificultar la accesibilidad a pie o en bicicleta. La población residente podría enfrentar desafíos adicionales para llegar a los servicios y actividades esenciales, especialmente si se encuentran en la cima de las colinas. Las barrancas pueden limitar el espacio disponible para construir nuevos servicios y actividades esenciales. Además, las restricciones de construcción en zonas de alto riesgo pueden limitar la capacidad de construir nuevas viviendas y servicios en esas áreas. Para implantar el modelo de ciudad de 15 minutos en una ciudad construida entre barrancas, puede requerirse una inversión significativa en infraestructura, como la construcción de rampas para mejorar la accesibilidad no motorizada a esos lugares. Esto puede ser costoso y llevar tiempo tanto en la planeación como obstáculos de la población en su implementación. En particular, esto último requiere de un cambio cultural. La implantación del modelo de ciudad de 15 minutos también puede requerir un cambio cultural significativo en la forma en que la población de la ciudad se mueve y accede a los servicios. Es muy importante fomentar tantos nuevos hábitos y patrones de movilidad como modificar los indicadores de bienestar individual, por ejemplo, la posesión de automóvil como evidencia de éxito.

Imagen creada con inteligencia artificial con la frase "sustainbility and energy in OGorman style" in https://huggingface.co/spaces/stabilityai/stable-diffusion

Debe quedar claro que, la implantación del modelo de ciudad de 15 minutos requiere un cambio cultural, entre otros aspectos, porque este enfoque promueve una forma de vida más activa, sostenible y comunitaria. El modelo busca reducir la dependencia del transporte privado y fomentar la movilidad activa, como caminar o andar en bicicleta, lo que puede ser una experiencia nueva para la población de zonas urbanas donde se ha priorizado el uso del automóvil.

Además, el modelo de ciudad de 15 minutos fomenta la creación de comunidades más conectadas, donde las personas pueden acceder a servicios y actividades esenciales cerca de sus hogares. Esto significa que la población puede pasar más tiempo en sus vecindarios y participar en la vida comunitaria local. Para algunas personas, esto también puede ser una experiencia nueva y requiere un cambio en sus patrones de comportamiento y relaciones, enfatizando que incrementa sustancialmente la cohesión del tejido social.

En general, para que la implantación del modelo de ciudad de 15 minutos tenga éxito, es necesario fomentar un cambio cultural en la forma en que las personas se movilicen y acceden a los servicios. Esto puede requerir campañas de concientización y educación para promover los beneficios del modelo, así como infraestructura adecuada y políticas públicas que faciliten la movilidad activa y la creación de comunidades conectadas y sostenibles.

En particular en Cuernavaca hay una oposición a la implementación de una ciclovía en la Av. Palmira, cuyos pobladores no se percatan de los beneficios de esta acción. Merecemos que la población en general comprenda que para conseguir el bienestar social, hay que ceder en algunos beneficios no compartidos que se han convertido en privilegios de algunas personas marginando al resto de la población. 

En conclusión, implantar el modelo de ciudad de 15 minutos presenta desafíos significativos que son diferentes en cada lugar y suelen estar relacionados con la topografía, las limitaciones de espacio, la infraestructura disponible y con la necesidad de un cambio cultural que apunte hacia el bienestar común. Es importante abordar estos desafíos para garantizar que el modelo sea efectivo y justo para toda la población de la ciudad y sus entornos.

Este artículo fue publicado el día 26 de abril en el periódico La Unión de Morelos

miércoles, 12 de abril de 2023

Urge transporte sustentable en las zonas metropolitanas de Morelos

Uno de los factores que intervienen en la calidad de vida que llevamos es el tiempo que le dedicamos a transportarnos de nuestros hogares a nuestros sitios de trabajo. En mi caso vivo en Cuernavaca y hago aproximadamente 30 minutos en auto para trasladarme. Quiero comentar que estoy regresando de un período de trabajo en Londres donde, de acuerdo a Google maps, invertiría el mismo tiempo de haberme transportado en auto del lugar donde residía al laboratorio. En cambio puedo decirles que invertía menos de 40 minutos en ese traslado usando el transporte público, el metro (Underground). Esta pequeña diferencia en tiempo hacia que prefiriera usar el transporte público y darme tiempo para leer libros o artículos o escuchar pódcasts. En cambio, en el caso de Cuernavaca, el tiempo de traslado en transporte público sería de aproximadamente una hora y 30 minutos, es decir, tres veces más que en automóvil. Por supuesto, esta abismal diferencia hace que la opción de transporte público sea menos preferida. 
Hoy durante mi traslado matutino, pude observar tránsito lento, en la dirección Sur Norte, en el libramiento de Cuernavaca que se alentaba todavía más en el tramo entre Xochitepec y el Polvorín. También a mi regreso fui partícipe de movimiento lento en ese mismo tramo de la carretera del Sol (México-Acapulco); a esa hora iba en el sentido del tránsito lento. 
Hace más de 10 años, para ser precisos el 22 de agosto de 2012, escribía que estábamos resintiendo el aumento del tránsito vehicular en el libramiento y que al entonces gobierno no le interesaba desarrollar un sistema sustentable de movilidad. Como ejemplo mencionaba que el Parque Científico Tecnológico que se estaba promoviendo no tenía acceso por medio de transporte público y que la planeación de un sistema de transporte público que conectara la parte norte de Cuernavaca con Xochitepec era de vital importancia.

Ilustración elaborada con inteligencia artificial en https://labs.openai.com/ con la frase "people entering in an electric bus in a BRT station picasso style". Para conmemorar a Pablo Picasso.

Es decir, la comunidad científica-tecnológica de Morelos nos involucramos con los problemas que sufrimos y proponemos soluciones en concordancia con los conocimientos que generamos o entendemos en tiempos adecuados. No solo esta comunidad, sino muchas personas preocupadas por esta situación, ya en 2012, proponíamos el desarrollo de sistemas de movilidad como los Autobuses de Tránsito Rápido (Bus rapid transit, BRT). En nuestro país más conocidos como metrobús. En febrero del 2013, nuevamente abordé el tema y mencionaba la opción eléctrica (Ligas). En la actualidad podemos decir que, en la mayoría de las ciudades con mayor calidad de vida, el transporte público es de calidad y se observa una decidida transición hacia la electromovilidad. 
¿Qué pasa en nuestros entornos? ¿Cómo ha cambiado el transporte público en Cuernavaca o Cuautla en estos diez años? La verdad no ha cambiado, han pasado gobiernos de diferentes partidos tanto en los gobiernos estatales como municipales sin apostar por verdaderas soluciones sustentables en el tema del transporte público.
Desde mi perspectiva, la transición hacia la electromovilidad individual es necesaria, pero no es la solución para una movilidad sustentable.
Déjenme reiterar las bondades de los sistemas tipo metrobús (BRT):  Los autobuses eléctricos BRT pueden reducir significativamente las emisiones de gases de efecto invernadero y otros contaminantes en comparación con los autobuses de combustión interna, lo que ayuda a mejorar la calidad del aire y la salud pública. También suelen ser más eficientes energéticamente que los autobuses de combustión interna, lo que resulta en un menor costo operativo y una mayor sostenibilidad económica para los concesionarios. Los carriles exclusivos de los autobuses BRT y los sistemas de prepago, tarjetas de metrobús, permiten que los autobuses viajen más rápido y reduzcan los tiempos de viaje en comparación con los autobuses convencionales donde se paga al abordar y paran a diestra y siniestra. Adicionalmente con las estaciones preestablecidas se pueden hacer nivelaciones entre el piso del paradero y el nivel de acceso al autobús para que los BRT sean más accesibles para las personas con discapacidades o movilidad reducida. Los autobuses BRT normalmente mejoran la calidad de servicio, como una mayor frecuencia y puntualidad, lo que puede aumentar la satisfacción de la población incrementando la lealtad y con ello la disminución del uso del transporte en automóvil. Evidentemente, al ofrecer una alternativa más eficiente y atractiva al transporte privado, los autobuses BRT pueden ayudar a reducir la congestión del tráfico y mejorar la movilidad urbana en general.
Insisto la movilidad mediante transporte público eléctrico será la opción en el futuro, no veo razón alguna para continuar postergándola. Exijamos a quien ocupa puestos de decisión en los diferentes niveles de gobierno a que empiecen a implementarla en conjunción con alternativas de movilidad no motorizada y los cambios en la infraestructura urbana correspondientes. Considero que debemos realizar simulaciones de las ideas que concibamos para avizorar los problemas y las bondades de estas propuestas, ya tenemos ejemplos para Cuernavaca y su libramiento. Es urgente que concibamos alternativas de movilidad sustentable en Morelos y en los entornos de las ciudades medianas en México. Reitero mi disposición a colaborar para concebir, diseñar e implementar estas alternativas que contribuirán a incrementar la calidad de vida en nuestras ciudades.

Una versión previa de este artículo fue publicada el día 12 de Abril en el periódico la Unión de Morelos.

miércoles, 5 de abril de 2023

El saludo, una microfelicidad al caminar

De los placeres que hemos perdido con la actual vida que llevamos en las ciudades de México es el disfrute de la caminar por ellas. Les puedo platicar que tuve la oportunidad de vivir una año en Londres donde no usé el automóvil durante un año y me movilicé mediante el transporte público o caminando. El poder desplazarme con seguridad y tranquilidad por esa gran urbe para conocer sus diferentes vecindarios y las grandezas de otro tiempo, pero que permanecen de pie y en uso para las actuales personas, resulta beneficioso en mi salud tanto física como mental. Adicionalmente, el poder caminar y con acceso a la tecnología, me permitió escuchar pódcasts y enterarme de noticias tanto cotidianas como de ciencia o poner atención a reflexiones sobre diferentes temas científicos, sociales y artísticos.
En estos días de regreso a Cuernavaca empecé a caminar para realizar algunas de mis actividades cotidianas dentro de distancias caminables y me sorprendió algo que no disfruté en Londres, además del caluroso clima.
Tengo que enfatizar que para mi sorpresa al caminar por el noreste de mi ciudad, Cuernavaca, la gente saluda ante los encuentros con otras personas aunque no se conozcan. Comportamiento que nunca observe en todo el año en Londres. Esta amigable conducta forma parte de nuestra forma de ser y por supuesto que tiene beneficios y aporta al bienestar social.
Podemos decir el saludo es una forma de comunicación que se utiliza en muchas culturas para establecer un vínculo entre las personas. La costumbre del saludo ante el encuentro con otra persona sin conocerla con antelación, ni tener la certidumbre de otro próximo encuentro tiene varias bondades que contribuyen a la convivencia en colectividad y a mejorar el bienestar de las personas.
En primer lugar, el saludo es una forma de reconocimiento y respeto hacia la otredad. Al saludar a alguien, se está reconociendo su presencia y se le está mostrando que es importante y que tiene valía en el espacio compartido. Esto contribuye a crear un ambiente de cordialidad y amabilidad en la comunidad, lo que puede llevar a la generación de vínculos más sólidos y duraderos.
Adicionalmente, el saludo es una forma de crear un sentido de comunidad y pertenencia. Cuando las personas se saludan entre sí, están estableciendo un vínculo de familiaridad que les permite sentirse parte de un grupo. Esto puede ser especialmente importante en contextos urbanos, donde el anonimato puede generar una sensación de aislamiento y desconexión social.

Imagen creada con la frase: impressionist style one person walking in front another person in a city giving a regards "good morning" en  https://labs.openai.com/

Otra bondad del saludo es que puede ser un gesto que ayude a romper las barreras culturales y lingüísticas. En muchos lugares, el saludo es una práctica común que trasciende las diferencias de idioma y cultura. Al saludar a alguien, se está enviando un mensaje de amistad y buenos deseos, que puede ser entendido por personas de diferentes orígenes y nacionalidades.
Por último, el saludo también puede tener un efecto positivo en el bienestar emocional de las personas. Al recibir un saludo, el sentimiento de reconocimiento y valoración, genera alegría y satisfacción. Además, el saludo puede ayudar a reducir el estrés y la ansiedad, ya que establece un ambiente de tranquilidad y relajación. Al recibir una voz con saludo al caminar por los lugares, sean conocidos o no, nos da sentido de aceptación.
La conducta de saludo al encuentro durante las caminatas parece ser una costumbre de zonas rurales o menos urbanizadas. Sin embargo, considero que es una agradable costumbre que debemos cultivar para renovar el deteriorado tejido social que sufrimos actualmente en las ciudades medianas de nuestro México.
El recibir un saludo durante nuestras caminatas en las ciudades es una microactividad que contribuye directamente al bienestar comunitario.
Déjenme enfatizar lo ya dicho, el saludo es una práctica común en muchas zonas rurales que tiene diversas bondades para la convivencia en colectividad y el bienestar de las personas. Al reconocer y respetar la otredad, crear un sentido de comunidad y pertenencia, romper barreras culturales y mejorar el bienestar emocional, el saludo se convierte en una práctica valiosa que deberíamos fomentar en nuestra vida cotidiana y nos aporta momentos de microfelicidad.

Este artículo fue publicado el día 5 de abril en el periódico la Unión de Morelos.