Estamos condenados a ceder nuestros datos, hábitos de consumo, hábitos de movilidad a compañías como Twitter y Facebook. La verdad es que esta afirmación es falsa. Somos victimas de las grandes compañías de las redes sociales porque lo aceptamos y no hemos buscado alternativas.
En el mundo, se ha alertado sobre este peligro y más cuando esta información ha sido utilizada para manipular elecciones en sociedades que se precian de ser la vanguardia, como en Estados Unidos y Reino Unido, por citar ejemplos. Esta alerta pone en la mesa de discusión que la información y uso de ella puede conducir a la toma de decisiones que obedezca a intereses que no sean los más adecuados para las personas en conjunto. Por ejemplo, las películas como “Nada es privado” (Great Hack) y Social Dilema que desde 2019 y 2020, en plena pandemia, nos ilustraron como se usan los algoritmos en diferentes plataformas para mantener nuestra atención. Nuestra atención y con ello mostrarnos propaganda tanto de productos como de ideas y construir visiones del mundo sesgadas.
El claro objetivo de controlar una de las redes más influyentes en el ámbito de la política por Elon Musk aunado a que otro personaje de los más ricos del mundo controla otra de las mayores redes, nos debe alertar y hacer reflexionar sobre el uso de estas redes donde depositamos tanto información personal, familiar, de negocios y política.
A pesar de estas alertas, he estado utilizando estas redes; aunque debo decir que con algunas precauciones, en especial con Facebook (FB), evito usar Whatsapp e Instagram para no aportar información cruzada con FB al grupo Metaverso. Sin embargo, en las últimas semanas he estado buscando alternativas, en especial a Twitter, de donde ya diferentes colegas han migrado por diversas razones que comparto.
La semana pasada decía que podemos encontrar una diversidad de opciones para Twitter en los servidores de Mastodon. Ahí mismo daba como referencia un excelente artículo de María Lázaro que explica sucintamente lo que es el Fediverso. En resumen, es la federación de sitios descentralizados para comunicación digital entre comunidades. La lectura de este artículo me abrió un mundo que desconocía aunque estaba al alcance de mi mano.
Primero, si bien Mastodon es el software abierto que usan la mayoría de estos sitios para comunicarse mediante un protocolo transparente y abierto y poder compartir la información, el Fediverso no se limita a las microbitácoras (microblogging) como Twitter, sino que existen opciones que pueden competir con otras redes que utilizamos. Desde mi punto de vista, tenemos dos grandes ventajas en el Fediverso 1) que nuestra cuenta es única y 2) que nuestras contribuciones, “posts”, no son analizados por robots para posteriormente vender la información que generamos o para mostrarnos publicidad; mastodon.social no vende o comercia o transfiere información personal a otras organizaciones. Ya en sí estas características me parece muy adecuadas. Con la primera característica, de una sola cuenta podemos publicar y compartir textos, audios, imágenes, videos cualquier tipo de contenido digital. La segunda se garantiza cuando sabemos que Fediverso no tiene dueño, ni junta de accionistas y por lo tanto no requiere aportar ganancias a alguien, sino que se mantiene por el interés de las diferentes comunidades con aportaciones monetarias de las personas usuarias para su mantenimiento.
De acuerdo con el resumen que nos comparte María Lázaro, en el Fediverso está la plataforma PeerTube para compartir videos equivalente con Youtube y Vimeo. También está Friendica que tiene funciones similares a FB al poder publicar textos, fotos (con opción de etiquetado de personas o lugares), audios, videos, crear enlaces de grupos de amistades y montar eventos. En el Fediverso encontramos a PixelFed red social para compartir fotos y videos con posibilidades de usar filtros, se parece a Instagram. Si deseamos compartir audios o pódcasts está disponible FunkWhale que compite con Spotify.
La ventaja de todas estos sitios es que operan bajo un protocolo abierto, la mayoría usa ActivityPub, pero la federación requiere que sea de código abierto para poder monitorizar las operaciones que no deben procesar la información con algoritmos para mantener nuestra atención o darnos publicidad.
La principal limitación es que todavía hay pocos perfiles en la mayoría de estos sitios y que entonces el alcance es menor a las plataformas comerciales. Sin embargo, con una sola cuenta desde algún Mastodon podemos seguir a personas en otro Mastodon y a personas que publiquen en PeerTube o PixelFed sin necesidad de abrir otra cuenta. En cambio si estoy en Twitter y quiero establecer comunicación con alguien en FB o Instagram tengo que abrir cuenta en esas redes para hacerlo.
En mi opinión, el Fediverso constituye una opción que responde a la necesidad de compartir información con otras personas en el mundo globalizado, pero que por construcción respeta la individualidad y no lucra con la información ni con los contenidos que ofrecemos en ellos. Esta opción invita a construir las relaciones en la Internet en una forma diferente a la conceptualizada como unívoca mediante la utilización comercial de nuestras actividades.