miércoles, 24 de septiembre de 2014

Alzate y la energía solar


Hace cinco años recibí un correo electrónico de Antonio Eloy Arce, un jóven biólogo, que me invitó a dar una plática de ciencia en Ozumba de Alzate bajo un ciclo de charlas “los Jueves de ciencia con Alzate”. Me sorprendí de la invitación y, como la mayoría de las veces me invitan de escuelas a dar pláticas, le pregunté que de qué escuela me hablaba. Me respondió que era un esfuerzo ciudadano por hacer llegar la ciencia a la comunidad de Ozumba. Le pregunté por su formación, me comentó que había estudiado biología y que le interesaba mucho la divulgación. En ese tiempo dí la plática en la Casa de la Ciencia de Ozumba. Las sorpresas continuaban, Ozumba ¡tenía una casa ciencia!
Podría contar lo agradable que fue en ese momento dar la plática e intercambiar ideas con los jóvenes de aquella comunidad y mi experiencia de aquel entonces, pero mejor contaré lo que pasó la semana pasada.
El jueves pasado volví al municipio de Ozumba, pero ahora a una población cercana, Cuijingo. En estos años Antonio Eloy ha formado una Asociación civil, “Atzompan de Alzate XXI” donde trabajan 6 personas muy involucradas con la divulgación de la ciencia. Ese jueves Impartí una plática titulada “Nuestra casa dorada” donde abordé temas principalmente de energías solar y desarrollo sustentable. La interacción con los jóvenes fue muy franca, en un salón de usos múltiples abarrotado, platiqué con entusiasmo las bondades de los calentadores solares, así como de la utilidad y los principios físicos de los sistemas fotovoltaicos y de los retos que plantea la sustentabilidad.
Todo ocurrió digamos normalmente, hubo preguntas interesantes que me recordaron el cuento llamado “Pozole radiativo” y a conversaciones radiofónicas que he tenido últimamente. En estas últimas conversaciones muchas personas confunden radiación con radioactividad, palabras parecidas; pero muy diferentes en significado y más cuando nos referimos a problemas de seguridad.
Tuve dos grandes sorpresas adicionales: La primera al entrar a Ozumba vi un local comercial que anunciaba la venta e instalación de calentadores solares. ¡Brinqué de gusto! Y pensé: debo encontrar aquí cerca una instalación de un calentador solar.


Efectivamente a unos doscientos metros en la azotea de un hospital observé un calentador solar brillando y sufriendo las inclemencias de los rayos solares; pero seguramente los dueños del hospital estaban contentos de que ese día gran parte de su suministro de agua caliente no contribuiría al efecto invernadero antropogénico. Con esta evidencia pensé que la empresa de calentadores solares pudiera ser una muestra de nuestras afirmaciones en el sentido que las fuentes renovables de energía promueven el desarrollo de micro y pequeñas empresas instaladoras. Para que esta situación sea prometedora debo preguntar en mi plática si hay calentadores solares instalados en las casas de los asistentes
Cabe aclarar que hace cinco años hice esa pregunta y por supuesto, ninguno de los asistentes tenía instalados calentadores solares en sus casas. En esta ocasión, afortunadamente cuatro personas comentaron que si tenían calentadores solares en casa. Así ese jueves en Cuijingo en una plática sobre fuentes renovables de energía estábamos cinco asistentes que nos habíamos bañado con agua calentada con energía solar. (Liga a la biografía de José Antonio Alzate).

Por otra parte, el domingo pasado viajé a León, Gto. y durante el viaje me percaté que en la carretera de México a Querétaro al menos hay un calentador solar en el techo de una casa habitación, pero en la carretera que va de Querétaro a Irapuato, muy cerca de Celaya, hay varias unidades habitacionales donde todos los techos tienen instalados calentadores solares. Esto último es producto del programa de hipotecas verdes que nuevamente apunta hacia la promoción de empresas que comercializan productos para aprovechar la energía solar.


La divulgación de las fuentes renovables de energía es una de las tareas fundamentales que tenemos que promover y en la que estamos participando. La definición de programas gubernamentales que fomenten el uso de las fuentes renovables de energía es una tarea que tenemos que vigilar e impulsar desde la sociedad, la academia y por supuesto desde la industria.
Considero tenemos ejemplos exitosos de estas actividades en las situaciones he comentado, pero todavía distan de ser contundentes. Los invito a participar en ellas para contribuir al bienestar social.
El reto que han asumido los amigos de “Atzompan de Alzate XXI” merece nuestro apoyo y su reproducción en cada ciudad de nuestro país.

Una versión previa de este artículo fue publicado el día 24 de Septiembre en la Unión de Morelos

miércoles, 3 de septiembre de 2014

La necesidad de mantener una radio libre de monopolios

Hace más de 25 años cuando decidimos vivir en Morelos una de las cosas que extrañaba de la Cd. de México eran las estaciones de radio que disfrutaba oír. Les comento que cuando joven deseaba poder tener un radio para escuchar mientras viajaba en trolebús o camión, ahora tengo la costumbre de prender el radio mientras manejo. Para mí el poder recibir información mientras viajo es de suma importancia y es una forma de conectarme con el mundo. Hoy en día tengo a mi alcance diferentes dispositivos que me permitirían grabar música y escucharla; sin embargo eso me parece una actitud de autoaislamiento que muestran muchas personas en la actualidad.
De regreso a hace 25 años, la pregunta de cuál sería una estación similar a Radio Educación o Radio UNAM disponible para la época en Cuernavaca era uno de mis temas en las pláticas con colegas que ya tenían algún tiempo viviendo en esta ciudad de la eterna primavera. Invariable y tristemente la respuesta era desalentadora.
A lo largo de estos 25 años, he sido testigo de cambios importantes en la radio morelense. Contamos con UFM Alterna, la radio de la UAEM que tiene una programación interesante, pero en algunas épocas ha sido demasiada restringida a transmitir aspectos relacionados con su comunidad. Durante una época la radio gubernamental tuvo una barra muy interesante dedicada a darle voz a la comunidad morelense. Esa época la gocé y aproveché. Sin embargo, durante seis años perdió su apertura a la crítica y su vocación social para convertirse en repetidora de música no diferenciada de lo que una persona podría guardar en dispositivos electrónicos.
Hoy en día he encontrado una estación con la que me divierto, ilustro y considero tiene contribuciones importantes para conformar una cultura morelense en las personas pequeñas de nuestra sociedad. También nos presenta entrevistas con científicos y artistas que comparten con gusto sus contribuciones. El concepto radiofónico del Instituto Morelense de Radio y Televisión (IMRyT) es una opción interesante y producto de la colaboración con diversas instituciones que brinda información y divertimiento con una perspectiva cultural rica y multifacética. Por ejemplo las colaboraciones del Instituto de Energías Renovables, UNAM con el IMRyT, en este mismo sentido la colaboración de la Academia de Ciencias de Morelos con Minutos TV donde se genera contenido de calidad.
Hoy me gusta oír en las mañanas las noticias en la radio comercial o las entrevistas de científicos en la radio de la UAEM y el resto del día he encontrado que la programación del 102.9 FM es interesante. Me hace sentir nuevamente niño o joven o adulto todo con profesionalismo y contenido.
Claramente estos comentarios conllevan a que actualmente la radio comercial no permite esta diversidad cultural, sino que restringida, por un lado a crear un consumismo o en el mejor de los casos a una crítica del sistema, fomenta una única forma de percibir el entorno. Así se promueve una cultura global que promueve una percepción hegemónica, aburrida y limitada de nuestra entorno social, ambiental y económico. Una visión monopólica que no permite un adecuado desarrollo hacia el bienestar social.
Este hecho es un ejemplo de otra trampa que señala Donella Meadows en su libro “Thinking in Systems” en la que caemos cuando no consideramos las interacciones del sistema complejo en el que vivimos. A esta trampa la llama “éxito al exitoso”, en palabras de dichos mexicanos, podría ser: “el que tiene más saliva traga más pinole”. La Dra. Meadows propone para evitar esta trampa: la diversificación, permitiendo a los que están perdiendo que obtengan beneficios para continuar con el juego; limitación estricta para que alguien se quede con todo el éxito, es decir siempre haya fracciones del pastel para diversos actores (leyes antimonopolio); políticas que nivelen el campo de juego, la eliminación de parte de la ventaja de los jugadores más fuertes o el aumento de la ventaja de los más débiles; entre otras acciones. Es decir concuerda hasta con los neoliberales y propone limitar los monopolios en todos sentidos.
Con estas acciones la sociedad garantizará un bienestar social que redundará en un sistema más saludable y con miras a un mayor desarrollo.


En la actualidad estamos participando de una sociedad hipercomunicada donde los medios masivos juegan un papel preponderante, al mismo tiempo que la Internet ha cambiado las formas de comunicación, sin embargo debemos propiciar que la diversidad sea parte fundamental de estas formas de comunicación.
La radio y televisión en Internet debe también atender a la diversidad cultural y promover el intercambio de ideas, conocimiento y cultura en general entre la población mundial. De esta manera las radios y televisiones comunitarias son importantes, pero también la iniciativa privada debe recuperar estos espacios para propiciar directamente bienestar en su entorno y ampliar el espectro de cultura en el ámbito internacional. Al poner a disposición del mundo las manifestaciones culturales locales estamos ampliando las perspectivas globales de desarrollo.
Hay mucho quehacer, en Morelos tenemos algunos esfuerzos significativos en la dirección propuesta, pero necesitamos consolidarlos y dejarlos inmunes a los cambios periódicos asociados con los gobiernos.
Reitero mi recomendación de la lectura del libro “Thinking in Systems” tiene una perspectiva interesante y que condensa diversas visiones con un pensamiento crítico y analítico que nos sirve para analizar, como lo he planteado, desde la reforma energética, la organización de universidades hasta la inconveniencia de los monopolios, es decir las partes o el todo de nuestra sociedad, economía, entorno físico y esquemas institucionales

Una versión resumida de este artículo fue publicado el día 3 de Septiembre

miércoles, 13 de agosto de 2014

Reflexiones sobre el desempeño y evaluación en organizaciones

Hace algún tiempo comentaba sobre las posibilidades de transformar nuestras instituciones educativas en organizaciones que consideren la generación de conocimiento como una tarea multidisciplinaria y construida por diversos entes que interaccionan de manera equilibrada y donde sus interacciones son, quizá, más importantes que las personas mismas. Este enfoque concuerda plenamente con lo que comenté la semana pasada al utilizar el texto de Donella Meadows (Thinking in Systems) sobre conceptos de sistemas complejos. En esta ocasión, bajo la mismas premisas, comentaré otras dos trampas en la que caemos en nuestras organizaciones en los procesos de evaluación y definición de objetivos. Estoy convencido que la definición de objetivos pobres y formas de evaluación dominadas por criterios que promuevan “buenas” evaluaciones para todos son trampas en las que caemos en organizaciones de todo tipo (por ejemplo empresarial, social o educativa). Debido a mi experiencia en este escrito ilustraré los hechos, cuando lo considere necesario, refiriéndome a entidades académicas, seguramente cada uno de los lectores podrá encontrar ejemplos en su entorno inmediato.
Debo reconocer que el sector académico de educación superior de alto desempeño en México es evaluado continuamente por diferentes actores. Déjenme detallar este punto. Un profesor investigador de una institución de educación superior es evaluado por su institución para su permanencia y, en su caso, promoción, pero también puede someterse a otra evaluación en el contexto nacional por parte del Sistema Nacional de Investigadores. Estas dos evaluaciones comparten aspectos, pero en general suelen ser diferentes en el énfasis de los tópicos y en la composición de las comisiones que la realizan. Estas dos evaluaciones redundaran en retribuciones económicas para los académicos, es decir, el salario final del académico depende fuertemente del resultado estas evaluaciones. Hasta aquí pareciera que la situación es adecuada.


Sin embargo, tengo que mencionar que en ocasiones el resultado no favorable de las evaluaciones condiciona la forma misma de la evaluación, y esta es modificada para que la mayoría de los evaluados obtenga mejores niveles de recompensa. Esto conduce a la modificación de criterios que promueven un desempeño que cada vez más pobre generando un corrimiento hacia un rendimiento menor del sistema. En este tópico D. Meadows sugiere mantener los estándares de rendimiento en términos absolutos. Mejor aún, propone que los estándares pueden incrementarse mediante apuestas reales hacia un mejor desempeño basado en la mejora de la infraestructura que permita alcanzar estos nuevos estándares, y así propiciar un mejor rendimiento del sistema.
El otro aspecto consiste en que frecuentemente se busca una meta equivocada. El sistema académico es muy sensible a la retroalimentación y modifica su comportamiento ante indicaciones que pueden orientar en forma inexacta o incompleta. Por ejemplo el demandar la publicación de artículos de investigación es una solicitud incompleta o inexacta. Desde mi punto de vista la sociedad considera a las instituciones de investigación como integrales y demanda algo menos incompleto e inexacto: la generación de conocimiento, formación de personal altamente capacitado y comunicación de estos nuevos conocimientos a la sociedad. Todo ello con la intención de propiciar el bienestar social. Este mensaje no debe ser dado de tal manera que pueda partirse en tres objetivos, sino debe ser transmitido de forma que contemple las variantes de énfasis, pero conserve la unidad de este reclamo social. Para que el sistema sea saludable se debe poner especial atención en no confundir el esfuerzo con el resultado o tendremos una organización que se esfuerza, pero descuida los resultados que la sociedad necesita.
En este sentido podríamos considerar entidades evaluadoras que no sean formadas por entes de la propia organización, con la finalidad de no orientar los indicadores hacia el bajo desempeño. La solicitud de participación de los locales en las comisiones evaluadoras generalmente se argumenta diciendo que los locales conocen más de cerca las características del trabajo de la organización, pero esto conduce, la mayoría de las veces, al desempeño a la baja.
Por otro lado, para propiciar la conciencia sobre la contribución individual al sistema podría demandarse que cada individuo manifieste claramente los aspectos donde contribuye de manera significativa a la organización. Este último punto implicará un reconocimiento de las limitaciones individuales, pero propiciará una conciencia colectiva que resalte las contribuciones del individuo a la organización.
Claramente, las organizaciones requieren de la definición de indicadores de su desempeño y estos indicadores serán múltiples y diversos, así que para tener una organización de excelencia, cada miembro de la organización deberá buscar marcar en algún indicador de desempeño por arriba del promedio. Esta manera mostrará claramente la importancia de cada individuo en el sistema y promoverá un ambiente de reconocimiento mutuo de los miembros de la organización.
Espero sirvan estas discusiones para construir organizaciones que propicien el bienestar social.
Este artículo fue publicado en el periódico La Unión el día 13 de Agosto

miércoles, 6 de agosto de 2014

Reforma Energética: una tragedia de los comunes

Lo último que abordé en esta columna versó sobre el impulso al uso de las fuentes de energía renovables en el entorno de la llamada Reforma Energética. Ahora ya con las leyes secundarias prácticamente aprobadas tendremos que lidiar con una legislación que maximizan las ganancias que se obtendrán del petróleo en el menor tiempo posible.
Las leyes que están aprobando en las cámaras claramente consideran que el petróleo es un bien del país y que esta generación tiene todo el derecho a explotarlo, quemarlo o venderlo en el menor tiempo posible para obtener la mayor renta. En estos momentos no voy a discutir sobre los aspectos de quiénes serán los beneficiarios, solamente enfatizo que las leyes asumen que los hidrocarburos pertenecen a esta generación y que tenemos el derecho a agotarlos en aras de una economía basada en el consumismo.
La explotación que se promueve con estas leyes secundarias claramente no contempla lo que he señalado ya con anterioridad. He comentado que el precio de la energía producida con hidrocarburos no considera el costo de mantener la composición de la atmósfera de nuestro planeta. En otras palabras el costo de la energía que usamos está subsidiado por las generaciones futuras que no usarán esta energía; pero que si tendrán que pagar las consecuencias del cambio climático que estamos produciendo con la quema de los hidrocarburos.
Desde mi punto de vista esta Reforma energética se quedó muy corta en miras. En lugar de tener objetivos de largo plazo, se centró en propiciar la explotación del petróleo por esta generación, aunque el petróleo es un bien común de nuestra civilización.
Los comentarios que he presentado con anterioridad se basan en los análisis de sistemas complejos de nuestra situación. Claramente, el desarrollo económico sustentable es parte de la problemática de nuestra sociedad que involucra aspectos económicos, sociales, ambientales e institucionales que deben ser considerados para obtener una solución de largo plazo. En este sentido es importante prepararnos para con una metodología de sistemas complejos modelar y proponer soluciones a la problemática que enfrentamos. En particular, para este fín, recomiendo la lectura del libro de Donella H. Meadows titulado “Thinking in Systems” donde plantea un modelo interesante para representar a los sistemas complejos caracterizados por poseer elementos diversos, estructura e interacciones. En este libro analiza desde sistemas de ingeniería como el transporte, naturales como ecosistemas y particularmente al final aborda la problemática de sistemas sociales. Todo ellos desde un perspectiva muy interesante que permite encontrar trampas en las que hemos caído, como sociedad, y que evita avancemos en la resolución de los problemas. En el libro al mismo tiempo que se analiza y desmenuzan los problemas se proponen estrategias para su solución.
En particular, desde esa perspectiva la actual Reforma Energética, manifiesta que hemos caído en una trampa como sociedad y que se conoce como “la tragedia de los comunes”. Este comportamiento ocurre cuando hay un recurso común compartido, del que cada usuario se beneficia directamente de su uso, pero comparte los costos de su abuso con todos los demás. Por lo tanto, hay una percepción muy débil de la disminución del recurso por los usuarios y que orienta a tomar débiles decisiones de los usuarios para costear el mantenimiento de los recursos. La consecuencia de estos hechos es la sobreexplotación del recurso, erosionando hasta que el recurso deja de estar disponible para cualquier persona. Claramente, esto sucederá en el tema del petróleo para las futuras generaciones.


En su libro Donella Meadows propone la educación de los usuarios para que entiendan las consecuencias de abusar del recurso. También sugiere restablecer o fortalecer el vínculo entre las acciones de abuso y las consecuencias para los usuarios. La idea de esto último es que cada usuario sienta las consecuencias directas de su abuso. En el caso del petróleo, algo simple sería aumentar el costo del mismo para que, al menos, contemple los costos de mitigación ambiental. En otras palabras el petróleo, la gasolina, el gas deberían incluir en su precio, el costo del proceso de captura de bióxido de carbono para con ello preservar la composición química de la atmósfera y así evitar el cambio climático antropogénico.
Sea este un primer texto donde comentemos sobre las trampas en las que caemos al no analizar la problemática actual desde una perspectiva de sistemas complejos.

Este artículo fue publicado en el periódico "La Unión de Morelos" el día 6 de Agosto

miércoles, 23 de abril de 2014

Acciones para mitigar el cambio climático

En este mes fue dado a conocer un nuevo reporte del Panel Intergubernamental sobre el Cambio Climático (IPCC) que señala la urgencia de iniciar acciones para mitigar los efectos nocivos de los gases de efecto invernadero (GEI). El informe también evalúa las opciones de mitigación en los diferentes niveles de gobierno y en los distintos sectores económicos, así como las implicaciones sociales de las diferentes políticas de mitigación.
A continuación describiré algunos de los aspectos que considero importantes. Primeramente debo aclarar que por estrategias de mitigación del cambio climático, se entiende la intervención humana para reducir las fuentes o mejorar los sumideros de GEI.
En este reporte se establece que el desarrollo sustentable y la equidad constituyen una base para la evaluación de las políticas climáticas y ponen de manifiesto la necesidad de hacer frente el cambio climático.
Menciona que la mitigación eficaz no se logrará si los sectores individuales (económico, social y ambiental) promueven sus propios intereses de forma egoísta.
Aclara que para definir estas políticas públicas, tendientes a evitar el cambio climático, se requiere involucrar juicios de valor y consideraciones éticas, sociales y económicas para propiciar el bienestar social, valores culturales y valores no relacionados directamente con las personas.
Aspectos que hemos mencionado con anterioridad en este espacio y que conviene leer con detalle en el reporte.
En esta ocasión quiero destaca algunos aspectos que hemos discutido, pero considero importante rescatarlos en la forma expresada en el reporte. Se señala que desde hace unos años, muchas tecnologías de energía renovable han mostrado mejoras sustanciales en sus rendimiento y reducción de costos, y un número cada vez mayor de tecnologías de energías renovables han alcanzado un nivel de madurez para permitir el despliegue a escala significativa. Es decir también en la opinión del grupo de estudio estamos listos para usar masivamente a las fuentes renovables de energía.
Menciona que la energía nuclear es una fuente de baja emisión de GEI, pero su participación en la generación mundial de electricidad se ha reducido desde 1993. La energía nuclear puede contribuir al suministro de energía de baja emisión de carbono, pero existen una serie de obstáculos y riesgos. Entre ellos se incluyen: los riesgos operativos, y de extracción de uranio, los riesgos financieros y de regulación; además de los problemas no resueltos de gestión de residuos.
Esto último, para mí de los más preocupante.
En la actual situación, las tecnologías de captura y almacenamiento de dióxido de carbono podrían reducir las emisiones de GEI durante el ciclo de vida de las centrales eléctricas de combustibles fósiles.
Respecto al transporte, las medidas de eficiencia técnica y de modificación de los hábitos de las personas son factores importantes para la mitigación en todos los modos de transporte; además de nuevas infraestructuras e inversiones de reurbanización, podrían reducir la demanda de energía en el transporte para el 2050 en un 40% por debajo de la línea de base.
Un aspecto muy importante son los recientes avances tecnológicos que permiten la implantación de políticas para estabilizar o reducir el consumo global de energía en el sector de edificios para mediados de siglo. Nuevamente estamos ante la necesidad de combinar la tecnología con cambios en estilo de vida y del comportamiento para influir de manera significativa en el consumo de energía en los edificios. La mayoría de las opciones de mitigación para los edificios tienen co-beneficios considerables y diversos, además de un ahorro de costos de energía
En cuanto a la industria, las mejoras en la eficiencia de emisión de GEI y en la eficiencia del uso de materiales, el reciclaje y la reutilización de materiales y la reducción global de la demanda de productos y la demanda de servicios podrían, además de la eficiencia energética, ayudar a reducir las emisiones de GEI por debajo del nivel de referencia en el sector de la industria
Finalmente la planeación de las zonas urbanas es una opción de mitigación. Las oportunidades de mitigación más grandes con respecto a los asentamientos humanos son áreas en las que la demanda de residencia y la infraestructura no se construyen en un rápido proceso de urbanización, sino que se realiza mediante la planeación integral, esto es factible en regiones con gobernabilidad, capacidades técnicas, financieras e institucionales.
Por supuesto que en estas líneas no he podido agotar la riqueza del reporte, pero desde mi punto de vista estos aspectos, que han sido señalados por el IPCC, conducen a políticas públicas que pueden ser implantadas en nuestra ciudad, estado o país. Leamos el reporte y actuemos en consecuencia: usemos la tecnología y modifiquemos nuestro comportamiento.


Este artículo fue publicado el día 23 de Abril

miércoles, 5 de marzo de 2014

Estrategia Nacional de Energía para la sustentabilidad.

En estos textos he comentado sobre la Estrategia Nacional de Energía (ENE) establecida en el 2013 para el 2027. Es tiempo que se establezca la estrategia para los próximos quince años. En este sentido, la anterior estrategia abrió opciones muy interesantes al abrir a la discusión los regímenes de tarifas, también cuestionaba la dependencia de la forma de abastecernos de energía solamente con los hidrocarburos e impulsaba ligeramente el uso de las fuentes renovables de energía. En mi opinión debemos enfatizar más el uso de las fuentes renovables. Ante esta afirmación inmediatamente surge la pregunta ¿por qué vamos a enfatizar el aspectos de las fuentes renovables?


En primer lugar, porque el problema de satisfacer la demanda energética en nuestro país tiene que ser en un marco de un desarrollo sustentable, no podemos seguir contemplando el desarrollo para unos cuantos y solamente para los que habitamos en este tiempo, tenemos que propiciar un desarrollo de toda la gente y contemplar las restricciones del ambiente así como contemplar que la igualdad de oportunidades también sea para las generaciones futuras. El ambiente restringe el desarrollo, en la actualidad los costos de algunos productos deben contemplar los posibles daños al ambiente que producen. En particular el problema del abasto energético debe ser abordado desde la perspectiva de los cuatro pilares de la sustentabilidad: uno precisamente el medio ambiente, el económico, el social y por supuesto el institucional. Este último tiene que ver con aspectos de las normas y reglas que deberán ser definidas en la reglamentación secundaria de la llamada Reforma Energética. Necesitamos leyes que fomenten el uso racional y eficiente de la energía, que contemplen su distribución para todos los mexicanos, que genere riqueza para todos, no solo para unos cuantos.
Hoy en México estamos en un punto crucial y la Secretaria de Energía precisamente tiene una Subsecretaría de “Planeación y Transición Energética”, que ha señalado rumbos hacia las fuentes renovables. En el mundo, recientemente se han puesto en marcha diferentes plantas generadoras de energía eléctrica a partir de la energía solar. Todas ellas con capacidades mayores a los 200 MW. Es decir, en el mundo hay una estrategia clara de incremento en el uso de la energía solar. Estas plantas ocupan extensas porciones de tierra, que no están disponible en todo el país por igual. Sin embargo en la parte donde la tierra tiene otros usos, la generación distribuida solar puede utilizar los techos de nuestras edificaciones abaratando los costos de instalación y distribución. Actualmente los particulares solamente podemos generar la energía que consumimos; explorar la posibilidad del pago de la energía producida en exceso e inyectada a la red fomentaría el uso de sistemas fotovoltaicos para la producción de electricidad es uno de los aspectos a considerarse en el ENE. Esto último generaría la creación de pequeñas empresas de instaladores que utilizaría mano de obra capacitada fomentando la economía de las diferentes regiones.
No podemos abordar el problema energético desde la parte del abasto; tenemos que ver los flujos, tenemos que ver cómo van los flujos de una energía de un lugar a otro, cómo se trasmite y por otro lado tenemos que ver cuál es la estructura de nuestro sistema energético. Es decir, no basta con estudiar la disponibilidad energética, no basta con saber cuáles son nuestras reservas de hidrocarburos, no basta con conocer el potencial solar o el eólico, tenemos que optimizar los flujos de energía de un lugar a otro. Si usamos fuentes renovables de energía, ellas están distribuidas, y por lo tanto, pueden disminuir los costos de transmisión.
Uno de los problemas de las fuentes renovables es su intermitencia. En este punto es muy importante invitar a los colegas científicos y tecnólogos a desarrollar sistemas de almacenamiento que cumplan con los criterios de sutentabilidad. La ENE podría promover este tipo de investigación y desarrollo tecnológico.
El reto mayúsculo de almacenar energía de las fuentes renovables para la gran potencia es un problema abierto en el ámbito mundial, al que podríamos contribuir. En México tenemos la fortaleza de estar y de conocer la frontera de la ciencia en estos tópicos. Los programas actuales de ciencia, tecnología e innovación en estos tópicos construidos por Secretaría de Energía y el CONACyT: los Centros Mexicanos de Innovación en Energía apuntan hacia el desarrollo de las energías solar, eólica y geotérmica. Quizá un apoyo específico para el almacenamiento sería prometedor.
Tenemos que resolver el problema del almacenamiento de energía si queremos ver un transporte movido por fuentes renovables.
Entonces, debemos generar conocimiento en todas estas áreas: almacenamiento, transmisión inteligente y la estructura misma de los sistemas energético y por supuesto ciencia de materiales, ingeniería de procesos. ¿Para qué? Para tener un sistema que contemple todos los puntos de la energía: el abasto, el flujo y la estructura en un marco donde propiciemos desarrollo sustentable, contemplando la economía, el ambiente, la sociedad y las instituciones. Estamos en la definición de la estrategia Nacional de Energía, estamos a tiempo para planear.


Una versión previa de este artículo fue publicado el día 5 de Marzo